" No mataras.
Ya sabemos que al inicio
de la creación, Caín comete un acto indebido contra su hermano Abel.
A cuantos Abel no les
esta pasando lo mismo en la actualidad?
Dios recibe el clamor de
la sangre derramada en Tierra. Él sabe lo que esta pasando.
"Y yo os prometo
reclamar vuestra propia sangre [..]
Quien vertiere sangre de hombre, por otro
hombre será su sangre vertida, porque a imagen de Dios hizo EL al hombre» (Génesis 9, 5-6).
En el Sermón de la
Montaña, el Señor recuerda el precepto: “No matarás” (Mateo 5, 21), y añade el
rechazo absoluto de la ira, del odio y de la venganza. Más aún, Cristo exige a
sus discípulos presentar la otra mejilla (Mateo 5, 22-39), amar a los enemigos
(Mateo 5, 44). El mismo no se defendió y dijo a Pedro que guardase la espada en
la vaina (Mateo 26, 52).
No estamos llamado, solamente, a no cometer un acto de muerte, sino también a actuar para que no
sea ejecutado.
Jesús intervenía en estos
conflictos, para salvar la vida, de aquel que iba a ser apedreado.
Ni en legítima defensa
propia, Jesús no agrede para salvarse, nos llama a actuar de la misma manera.
Queda del Juez Mayor
dictar la sentencia.
Cierto es que si ves a un
hermano tuyo con excesos de vicios, le adviertes de sus consecuencias para que no muera a causa de los mismos.
A eso estamos llamados.
Debemos recordar que
existen pecados de pensamiento, palabra, obra y omisión.
Quitarle el alimento a
quien lo necesite, es matarle.
Quitarle la palabra a
quien deba y quiera aprender, es matarle.
Quitarle la luz a un ser
vivo para que no crezca, es matarle.
Encerrar a un ave libre,
del cielo ,en una jaula o cortar sus alas, es matarle.
Ocultarle los libros a
quien quiera aprender, es matarle.
Hay muchas maneras de
dejar que los demás vivan.
Dar licor al alcohólico
es quitar vida.
Dar droga al drogadicto
es quitar vida.
Dar azúcar al diabético
es quitar vida.
Dar desánimo al
desanimado es quitar vida.
Dar duda a quien duda es
quitar vida.
Pretender ocultar la palabra de Dios es quitar vida.
El derecho de vida nos
lo da Dios porque Él es nuestro creador.
Cuidarse y alimentarse
es una excelente manera de preservar la vida.
Quien haga lo contrario atenta
contra su propia vida.
No matarás. En este
mandamiento, se nos prohíbe atentar contra la vida nuestra y la de los demás. "
"Entonces Yahveh le dijo: "Que has hecho? Clama la sangre de tu hermano y su grito me llega desde la tierra". Genesis 4,10.
"Entonces Yahveh le dijo: "Que has hecho? Clama la sangre de tu hermano y su grito me llega desde la tierra". Genesis 4,10.