“9. <<Y esto lo
que comeréis de todo lo que hay en las aguas: todo lo que tiene aletas y
escamas en las aguas, y en los mares, y en los ríos, esto comeréis.
10. Y todo cuanto no
tiene aletas y escamas, en los mares y en los ríos, de todo reptil de las aguas
y de toda alma viva la en el agua, abominación es;
11. y abominaciones os
serán; de la carne de ellos no comeréis; y sus cadáveres abominaréis.
12. Y todo cuanto no
tiene aletas y escamas en el agua, abominación esto os será>>.”
Levítico 11, 9-12.
Biblia Septuaginta.
Las aletas son
miembros adaptados para la natación en los peces. Las aletas están provistas de
un esqueleto óseo o cartilaginoso con numerosos radios y vascularizadas.
La escama es una
lámina aplanada presente en la dermis de muchos seres vivos. Las escamas se
presentan en gran número, están imbricadas entre la piel. Su función principal
es la protección y el aislamiento.
Me pareció interesante colocar el siguiente texto:
“… ha tomado años a
los científicos a descubrir. Ahora sabemos que los peces con escamas y aletas
están equipados con un sistema digestivo que impide la absorción de venenos y
toxinas en su carne de las aguas en las que viven… El Bagre tiene aletas, pero
no tienen escamas. Estos carroñeros son los principales alimentadores de las
profundidades y su sistema digestivo está diseñado para absorber las toxinas
del agua en que viven. Almejas, langosta, camarones, cangrejos, mejillones y
calamares no tienen escamas o aletas y son altamente tóxicos. Estos, absorben
de forma natural todas las toxinas del agua que viven. Curiosamente, la
langosta y los cangrejos son crustáceos y son una parte de la familia de los
artrópodos, que incluyen gusanos, cucarachas y arañas !”.