NOMBRE DE LETRA
|
#
|
DESCRIPCION
|
SIGNIFICADO
|
|
6
|
Vau
|
6
|
Estaca de Carpa
|
Aumentar/Asegurar/Ayudar
|
Salmo 9, 1-11. | |
“Yo te alabo, Señor, con todo el corazón, | Alef |
Refiriendo tus numerosas maravillas. | |
En ti gozo y exulto | |
Y canto salmos a tu Nombre, Altísimo. | |
Cuando mis enemigos retroceden, | Bet |
Tropiezan y perecen ante tu presencia, | |
Pues tú llevas mi causa y mi litigio, | |
Sentado en tu tribunal de justo juez. | |
“Tu repruebas a los pueblos, extirpas al impío | Guimel |
Y borras sus nombres para siempre: | |
Perece el enemigo en ruina sempiterna, | |
Arrasas sus ciudades, se pierde su recuerdo. | |
Pero el Señor se sienta para siempre, | He |
Apresta el tribunal para el juicio. | |
Gobierna el orbe con justicia | |
Y juzga las naciones rectamente. | |
El Señor es el torreón del oprimido, | Vau |
Su refugio en los momentos del aprieto. | |
En ti esperan los que saben de tu Nombre, | |
Pues tú no abandonas, Señor, al que te busca.” | |
Salmo 33, 1-6. | |
“Bendeciré al Señor en todo tiempo, | Alef |
Sus alabanzas siempre en mi boca. | |
Mi alma se gloria en el Señor | Bet |
Y, al oírlo, se alegran los humildes. | |
Alabad conmigo al Señor, | Guimel |
Ensalcemos al unísono su Nombre. | |
Cuando busco al Señor, Él me responde | Dalet |
Y me libra de todos mis terrores. | |
Poned en Él los ojos, estad radiantes | He |
Y no tengáis los rostros
abatidos.” |
|
Salmo 36, 1-10. | |
“No te enojes por causa del impío | Alef |
Ni envidies al autor de iniquidad, | |
Pues presto como el heno languidecen | |
Como la hierba verde se marchitan. | |
Confía en el Señor y obra bien: | Bet |
Moraras en el país | |
Y de tu fidelidad tendrás contento. | |
Deja al Señor tus suertes, | Guimel |
Y abandónate a Él, que Él obrara. | |
El pondrá en plena luz tu causa justa | Dalet |
Y en claror de mediodía, tus derechos. | |
Apacigua tu ira y no te enfades | He |
Ni te enojes, quizá para hacer mal. | |
Serán abatidos los malvados | |
Y el que espera en el Señor tendrá al país. | |
Un poco, y el impío ya no existe; | Vau |
Si oteas sus parajes, ya no está. | |
Los humildes, en cambio, heredan el país | |
Y gozan de todo bien.” |
|
Salmo 110, 1-3. | |
“Aleluya. | |
Alabare al Señor con todo el corazón, | Alef |
En el consejo de los justos | Bet |
Y en la plena asamblea. | |
Grandiosas son las obras del Señor, | Guimel |
Meditadas por todos | Dalet |
Cuantos tienen en ella sus contentos. | |
Su obrar es majestuoso y esplendente, | He |
Su justicia permanece por los siglos.” | Vau |
Salmo 111, 1-3. | |
“Aleluya. | |
Dichoso el hombre que teme al Señor | Alef |
Y tiene en sus mandatos sus contentos. | Bet |
Pujante en el país es su linaje, | Guimel |
Pues la estirpe del justo es bendecida. | Dalet |
En su casa hay riqueza y abundancia, | He |
Y su prosperidad subsiste para siempre.” | Vau |
Salmo 118, 1-48. | |
“Dichosos los que, sin mancha en su conducta, | Alef |
La ley del Señor toman por guía; | |
Dichosos quienes observan sus avisos | |
Y lo buscan con todo el corazón, | |
Que no incurren en maldad | |
Y se guían por sus sendas. | |
Tú diste tus mandatos | |
A fin de que se cumplan con esmero: | |
Ojala que mis pasos sean firmes | |
En la guarda de tus leyes. | |
No quedare entonces defraudado | |
Por seguir tus dictados; | |
Con recto corazón te alabare, | |
Al aprender tus justas decisiones. | |
Tus mandatos yo, cierto, he de cumplirlos: | |
No me dejes por nada en abandono. | |
¿Cómo podrá un joven seguir el buen camino? | Bet |
Cumpliendo tu palabra. | |
Yo te busco con todo el corazón: | |
No permitas que me desvíe de tus mandatos; | |
En mi interior escondo tus palabras, | |
A fin de no pecar en tu presencia. | |
Bendito seas Señor, | |
Enséname tus leyes. | |
Con mis labios yo anuncio | |
Las decisiones todas de tu boca. | |
En seguir tus avisos tengo gozo, | |
Más que en toda riqueza. | |
Tus preceptos yo quiero meditarlos | |
Y fijarme en tus senderos. | |
En tus leyes me complazco: | |
Jamás me olvidare de tu palabra. | |
Haz merced a tu siervo: | Guimel |
Que yo viva y guarde tu palabra. | |
Destápame los ojos y que vea | |
Los misterios de tu ley. | |
Yo soy un peregrino por el mundo: | |
No me ocultes tus preceptos. | |
Mi alma se deshace de nostalgia | |
Hacia tus decisiones, de continuo. | |
Tú lanzas maldición a los soberbios | |
Que abandonan tus leyes. | |
Ahórrame el oprobio y la deshonra: | |
Yo observo tus avisos. | |
Aunque se unan los grandes y tramen contra mí, | |
Meditara tu siervo tus mandatos: | |
Yo tengo en tus avisos mis delicias, | |
Y ellos son mis consejeros. | |
Mi alma está tocando con el polvo: | Dalet |
Dame vida conforme a tu palabra. | |
Yo describo mi camino y tú me atiendes: | |
Adoctríname en tus instituciones; | |
Introdúceme al curso de tus leyes, | |
Que yo pueda rumiar tus maravillas. | |
Mi alma es toda llanto de pesar: | |
Susténtame, conforme a tu palabra. | |
Ahórrame las sendas mentirosas | |
Y hazme la gracia de tu ley. | |
Yo he elegido la senda de verdad | |
Y hago mío tus juicios; | |
Yo me apego a tu enseñanza: | |
No permitas, Señor, que me avergüence. | |
Correré por los caminos de tu ley, | |
Pues tú ensanchas mis entrañas. | |
Instrúyeme, Señor, en tus mandatos, | He |
Y yo los guardare hasta el final. | |
Dame saber y observare tu ley, | |
La guardare de todo corazón. | |
Encáuzame por la senda de tus leyes, | |
Que en ella me complazco. | |
Pon en mi inclinación a tus avisos | |
Y no a mi provecho. | |
Desvía mi mirada de lo vano | |
Y haz que viva en tus caminos. | |
Haz real en tu siervo la palabra | |
Que lleva a tu temor. | |
Aparta de mí el oprobio del recelo, | |
Pues tus decisiones son amables. | |
Mira mi amor a tus mandatos | |
Y hazme vivir en tu justicia. | |
Venga a mí, Señor, tu gracia | Vau |
Tu socorro conforme a tu promesa, | |
Y podre yo responder al que me insulta | |
Que fío en tu palabra. | |
No arranques de mi boca la palabra de verdad: | |
Yo confío en tus decretos, | |
Y he de guardar tu ley | |
Por siempre, eternamente. | |
Podre andar en la holgura, | |
Pues busco tus mandatos; | |
Podre hablar ante los reyes de tus revelaciones, | |
Sin tener que azararme. | |
Yo me complazco en tus preceptos | |
Y les tengo afección. | |
Bendigo tus prescripciones, que yo amo, | |
Y medito tus leyes.” |